Procedente de Japón, un candado inventado en principio para usarlo en bicicletas, pero igual aplicable a las motocicletas. La idea es bastante sencilla, es un candado que para poder abrirlo hay que soplar y demostrar que nos has bebido alcohol. Si soplas y no das positivo, el candado se abre, de lo contrario no se abrirá.
Si tu nivel de alcohol está por encima de lo permitido, el candado, a través de una aplicación en tu móvil se encargará de llamar a casa, a tus padres, a tu pareja o a la persona que tu decidas. Esta persona sabrá la cantidad de alcohol que tienes en tu cuerpo y esta persona será la encargada de convencerte de que no conduzcas, además de poder recogerte.
Si este candado se instalase en todos los vehículos se podrían prevenir un buen número de muertes y accidentes al año. Su precio ronda entre los 220€ y 290€ y puede comprarse directamente en su página web: http://alcoholock.com/